Tras una accidentada campaña electoral, que incluyó atentados contra la vida de Donald Trump y la retirada del presidente Biden de la contienda para dar paso a Kamala Harris, la jornada electoral en EE. UU., se llevó a cabo sin mayores contratiempos. La sexagésima elección presidencial de los EE. UU. dio una victoria abrumadora a favor de Trump y el Partido Republicano, al obtener 312 miembros del Colegio Electoral (270 requeridos para ganar la presidencia), el control del Senado (52 senadores) y, aunque no han concluido los escrutinios, probablemente también el control de la Cámara de Representantes.
Donald Trump encontrará un mundo muy cambiado con respecto a lo que se enfrentó en su primer mandato, lo que hará más complejo implantar las políticas anunciadas de una manera armónica. Por ejemplo, reducir el endeudamiento se hace cuesta arriba si al mismo tiempo se reducen los impuestos; pechar con aranceles las importaciones parece ir a contravía de reducir la inflación. Quizás por eso, la primera decisión de Trump ha sido el nombramiento de su gerente de campaña, Susie Wiles, como la jefa de su próximo gabinete (Chief of Staff). Wiles, la primera mujer en ocupar esa posición, es conocida por su capacidad para organizar eficientemente, lo que permitiría un arranque rápido de la nueva administración, en contraste con la anterior presidencia de Trump.
Aunque las elecciones dominaron el entorno internacional de esta semana, generando toda clase de especulaciones sobre cómo la nueva administración implementaría sus promesas electorales, el mercado petrolero también tuvo que gestionar otros elementos, tanto negativos como positivos: el huracán Rafael causó el cierre de la producción en algunas de las plataformas costa afuera en el golfo de México; el aumento en los inventarios de crudo y productos en EE. UU.; las reducciones en las tasas de interés por la Reserva Federal y el Banco de Inglaterra; las medidas del gobierno de China para aliviar las tensiones de financiación del gobierno local y estabilizar el crecimiento económico; el casi colapso del gobierno alemán, y las mayores tensiones geopolíticas sobre todo en el Medio Oriente. Todos estos eventos, en su conjunto, hicieron que los precios del petróleo se movieran dentro un rango relativamente estrecho, alrededor de los 74 dólares por barril, para el caso del crudo Brent.
Es indiscutible que el resultado de las elecciones en EE. UU. afecta el desenvolvimiento de las relaciones geopolíticas en todas las regiones del mundo, independiente de la persuasión o sesgo de los actores. El 5 de noviembre de 2024 resultó ser un día de sorpresas, récords, y muchas lecciones para los dos grandes partidos que se disputaban el poder; los gobiernos y políticos que apostaron, apresuradamente, en contra del candidato que resultó ganador, también han tenido que reajustar sus posturas.
Lo que es innegable es que la industria petrolera de EE. UU., que sobrevivió los embates de la incertidumbre y la inconsistencia de las políticas de la administración Biden, ahora podrán revisar sus planes y tomar decisiones de inversión sobre bases más sólidas. Esto podría ser un elemento importante en el balance petrolero global a mediano plazo.
No obstante, el mercado global tendrá que esperar para conocer los planes de la administración Trump, que, por ahora, se basan en anuncios hechos en campaña, no del todo coherentes, y en especulaciones extrapoladas del anterior gobierno de Trump.
Una nueva administración, podría reformular ciertas políticas que seguramente tendrían un impacto importante en las relaciones energéticas y geopolíticas internacionales. Solo como ejemplo:
Mayor esfuerzo en hacer cumplir las sanciones de la OFAC, sobre todo a Irán y quizás a Venezuela y Rusia.Relanzamiento más agresivo de los acuerdos de Abraham como mecanismo de lograr una paz sostenible en las relaciones árabe-israelí.Presiones a Rusia y Ucrania para negociar un cese de la guerra. Probablemente con una redefinición de fronteras. La región de Kursk podría ser la piedra de trancaRedefinición de las relaciones con los países miembros de la OTAN, al menos en términos presupuestarios. Algo que ya promovió Trump en su periodo pasado.Negociaciones comerciales con miras a imponer aranceles, particularmente, pero no limitadas a China. La visión de recuperar la manufactura en los EE. UU. es un reiterado mensaje del nuevo presidente. Revisión o retiro de partes de “Inflation Reduction Act” que es percibida como una ley climática emblemática del gobierno saliente. Reducción de las restricciones para optar por financiamiento de proyectos de desarrollo de combustibles fósiles.Retiro del Acuerdo Climático de París.
Estos ocho puntos pudieran modificar las condiciones de borde de las guerras de Rusia y Ucrania y las relaciones de la OTAN con esa guerra, las relaciones de Israel con sus vecinos árabes y el balance de poder regional. También impactaría la competencia del petróleo de EE. UU. con los productores de la OPEP+ y la seguridad energética del hemisferio occidental, incluyendo a Venezuela como gran base de recursos recuperables.
A la luz del resultado electoral en los EE. UU., el Departamento de Justicia, a través de la Fiscalía, está revisando todos los casos judiciales en los que está involucrado el presidente electo, con miras a retirar los cargos. También, el Departamento de Justicia dice haber frustrado un complot iraní para matar al presidente electo Donald Trump en las semanas previas a las elecciones y activaron la denuncia ante un tribunal federal de la ciudad de Nueva York.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, despidió a su popular ministro de Defensa, Yoav Gallant, en una movida sorprendente, en un momento en que el país está involucrado en guerras en múltiples frentes en toda la región. La medida desató protestas en todo el país. Aparentemente, la fractura entre los dos políticos comienza con diferencias sobre la futura actividad bélica en Gaza y se rumora que la ruptura final se produce por desacuerdos en cuanto a las conversaciones que el primer ministro tuvo con Donald Trump días antes de las elecciones.
En el frente de guerra en Ucrania, el resultado electoral pone en duda el apoyo de EE. UU. a Ucrania y, en última instancia, la capacidad de Kiev para rechazar la invasión rusa. Los ucranianos confían en que Trump les dará un espaldarazo una vez que no obtenga la colaboración de Putin para acomodar sus requerimientos.
En todo caso, la administración Biden parece haber acelerado la entrega de la ayuda ya aprobada y el ejército ucraniano incrementó los ataques contra los rusos. En efecto, el jueves 8, los rusos tuvieron uno de los días de mayores bajas, tanto en vidas humanas como en pérdida de material bélico. Adicionalmente, drones ucranianos parecen haber impactado buques de guerra estacionados en el puerto de Kaspiysk en el mar Caspio, así como también a la planta química Aleksin en el óblast de Tula, Rusia, dañando una instalación de producción de pólvora y paralizando su producción.
En la otra cara de la moneda, el presidente Zelenski, denunció esta semana que Rusia ha usado esta semana más de 800 bombas dirigidas, 600 drones y casi 20 misiles de diverso tipo. “Ese terror no se puede detener solo con palabras”, dijo Zelenski.
Una vez que el huracán Rafael, posiblemente el último de la temporada, devastara a Cuba, complicando su ya precaria situación energética, se abrió paso sobre las aguas calientes del golfo de México; en previsión al fortalecimiento del huracán a categoría 3, diecisiete plataformas de producción de petróleo y gas fueron evacuadas, afectando cerca de seiscientos mil barriles por día de petróleo equivalente (600 Mbpepd).
Sin embargo, antes de terminar afectando la totalidad de la producción del área, más de cinco millones quinientos mil barriles por día (5,5 MMbpepd), Rafael tomó una trayectoria más occidental, alejándose de las instalaciones energéticas, dirigiéndose a México; según los meteorólogos se espera que se debilite. Por otro lado, en su reporte semanal, la Administración de Información Energética (EIA) anunció que los inventarios comerciales de crudo en EE. UU. habían aumentado en dos millones doscientos mil barriles (+2,2 MMbbls), y el de productos aumento en tres millones trescientos mil barriles (+3,3 MMbbls), presionando los precios del crudo a la baja.
Las decisiones de la FED y del Banco de Inglaterra, de reducir las tasas de intereses de nuevo (-0,25 %), se consideran como una respuesta al positivo control de la inflación y su trayecto hacia el 2 % esperado: en gran parte, estas reducciones ya estaban factorizadas en los precios.
Según Jerome Powell, el presidente de la Reserva Federal, es demasiado pronto para estar seguro de que el banco no necesitará aumentar las tasas de interés el próximo año, aunque el Comité Federal de Mercado Abierto cree que no es probable. “No estamos en un mundo en el que podamos permitirnos descartar cosas con un año completo de anticipación”, dijo Powell, “es demasiada incertidumbre en lo que hacemos”.
Durante el mismo evento, un periodista le preguntó si renunciaría si Trump se lo solicitara y contestó con un rotundo “No”, mencionando la independencia de la FED del poder ejecutivo conferida por el congreso en 1913. Sin embargo, algunos analistas piensan que Powell podría ser destituido por el presidente, según lo establecido en la sección 242, Título 12, del Código de los Estados Unidos de América, o por revisión de esta independencia por autoridad del Congreso, donde Trump posiblemente termine teniendo control.
Mientras tanto, el resto del mundo continúa en su dinámica. Para menguar las incertidumbres de su economía, el gobierno chino aprobó un plan de 1,4 billones de dólares en cinco años, que incluye permitir a los gobiernos locales refinanciar su deuda.
El ministro de Finanzas, Lan Fo’an, detalló en una rueda de prensa que aprobarían un endeudamiento por un límite de ochocientos treinta y nueve mil millones de dólares (MMM$ 839), durante tres años, para ayudar a los gobiernos regionales a refinanciar su deuda. También los gobiernos locales tendrán acceso a una cuota separada de MMM$ 558 en forma de bonos locales especiales durante cinco años. El anuncio se hizo al concluir una reunión de cinco días del máximo órgano legislativo de China, el Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional.
La refinanciación de la denominada “deuda oculta” de los gobiernos locales reduce los costos de los intereses, lo que liberará recursos para dedicarlos en otras áreas productivas. Este anuncio fiscal es otra decepción para quienes esperaban un estímulo directo sustancial, ya que el paquete equivale al 0,5 % del PIB actual. Medidas adicionales, ya identificadas, se mantienen en reserva para ser utilizadas para contrarrestar los efectos potenciales sobre el crecimiento marcados por el regreso de Trump a la Casa Blanca.
En Irán, el gobierno está confrontando una inminente escasez de gasolina a pesar del racionamiento actualmente aplicado. Su sistema de refinación produce unos cien mil barriles por día de gasolina (100 Mbpd) menos que la demanda del mercado interno.
Europa no se escapa de los efectos de la transición energética. Alemania, en una reversión casi completa de la política energética del gobierno de Angela Merkel, los partidos conservadores alemanes CDU y CSU han calificado el cierre nuclear del país en 2023 como “ideológicamente incorrecto” y promueven un estudio de viabilidad sobre la reactivación de las plantas nucleares inactivas; este cambio podría diversificar las fuentes de energía y reducir la dependencia de gas ruso.
El comisario designado de Energía de la Unión Europea, Dan Jorgensen, quiere que el bloque ponga fin a las importaciones de gas ruso antes del objetivo de 2027, y presentará una hoja de ruta para terminar las importaciones de energía rusa durante sus primeros 100 días en el cargo. A casi 3 años de la invasión de Ucrania, el 18 % del gas utilizado viene de Rusia, la parte por gasoducto, a través de Ucrania, y lo recibido como gas licuado, se pretende sustituir por gas proveniente de EE. UU.
Hemos atravesado una semana muy movida, con una avalancha de noticias tanto positivas como negativas para el mercado petrolero. La frecuencia y alternancia de estos factores catalizadores generaron al menos una docena de inflexiones en la trayectoria del precio del petróleo, o sea una volatilidad aún mayor de la acostumbrada, moviéndose en un rango de alrededor de 3 dólares por barril.
Así las cosas, los crudos Brent y WTI, al cierre de la jornada el viernes 8 de noviembre, se negociaban en 73,93 y 70,38 dólares por barril respectivamente, cerrando la semana con una modesta ganancia de algo más de un 1 % con respecto a la semana anterior.
Aún no había secado la tinta de las actas electorales en EE. UU., cuando ya Nicolás Maduro se apresuraba a ponerse al frente de la fila de los “felicitadores”. En una muestra de “Realpolitik”, o quizás angustia, la cabeza del régimen venezolano envió una felicitación al pueblo norteamericano y a Donald Trump, y le extendió al nuevo presidente una rama de olivo como símbolo de “buena fe”. En realidad, el propósito de esta incómoda genuflexión es tratar de ofrecer algún tipo de señal temprana relacionada con el petróleo venezolano, que pudiera ser usada por los grupos de cabildeo petrolero que rodearán a Trump, a cambio de algún reconocimiento o extensión de tiempo, más allá del 10 de enero.
A juzgar por los mensajes durante la campaña de Trump, se puede concluir que, en general, Latinoamérica representa una baja prioridad en la agenda del presidente electo, sobre todo si logra reducir la inestabilidad de Eurasia. A la luz de un evento tan flagrante como el fraude electoral perpetrado por el clan de Maduro, y las pocas declaraciones de Trump sobre Venezuela, es difícil de imaginar que la visión de su administración considera a Maduro como un interlocutor legítimo. Es aún muy temprano para saber cuál será la estrategia de la nueva administración.
Las áreas de potencial cooperación entre los dos países son el control de la inmigración ilegal y el aspecto petrolero, aunque no parece suficiente para borrar cómo el régimen venezolano incumplió todo lo pactado con la administración Biden. Buscando lavarse la cara ante las reiteradas acusaciones de violaciones de derechos humanos, el régimen ha puesto en libertad a varios detenidos políticos.
Los casos de sobornos, lavado de dinero y apropiación indebida de fondos públicos, podrían representar obstáculos insalvables para potenciales relaciones con el clan Maduro, quien comanda una administración en estado de deterioro moral y ético de niveles difíciles de imaginar. Van apareciendo evidencias, internas y externas, que comprometen el sistema en una forma mucho más generalizada de lo que se pensaba.
Por ejemplo, esta semana, la filial venezolana de Telefónica, un operador global de telecomunicaciones que cotiza en la bolsa española, acordó pagar más de 85,2 millones de dólares para resolver una investigación del Departamento de Justicia sobre el soborno a funcionarios gubernamentales en Venezuela para recibir acceso preferencial a dólares en una subasta de divisas. También en España, a raíz de un caso de tráfico de influencias, las investigaciones revelaron que la misma gente formaban parte de una extensa red de corrupción relacionada con la venta de crudo venezolano para burlar las sanciones norteamericanas y lavado de dinero.
En el frente económico, el régimen enfrenta una menor recaudación por parte del SENIAT e ingresos estables provenientes del petróleo, por lo que el gasto público tuvo que limitarse, al igual que los trueques de crudo por gasolina. Según el Observatorio Venezolano de Finanzas, la tasa de inflación mensual se situó en un 9,6 %, en comparación con el 3,4 % de septiembre.
La producción nacional se mantuvo cerca de los mismos niveles de la semana pasada, ochocientos cincuenta y tres mil barriles por día (853 Mbpd), distribuidos geográficamente, como se describe a continuación:
Occidente 198 (Chevron 91)Oriente 138Faja del Orinoco 517 (Chevron 112)TOTAL 853 (Chevron 203)
Chevron produjo un total de 203 Mbpd, los cuales, después de su mejoramiento o dilución, se convierten en 230 Mbpd de crudo exportable. La empresa está movilizando el taladro al último pozo de los 17 que tienen contemplado perforar.
PDVSA emitió un comunicado para informar que la empresa mixta PetroCarabobo (PDVSA, Repsol, ONGC, Oil India e Indian Oil Corporation), en la Faja del Orinoco, ha puesto en funcionamiento seis variadores de frecuencia de energía con los que pudieron hacer la conexión de 12 pozos de crudo. Sin embargo, no se observa aumento en la producción de esa empresa.
Los niveles de refinación alcanzaron 192 Mbpd de crudo y productos intermedios, con un rendimiento de gasolina de 66 Mbpd y 78 Mbpd de diésel, lo cual incluye el arranque del reformador de Cardón, paralizado durante las últimas semanas.
Por ser muy temprano en el mes, no se evidencian tendencias en cuanto a la exportación, excepto que, tal como el mes pasado, se está priorizando la venta de crudo sobre el trueque por gasolina con Repsol, con el objeto de maximizar los ingresos de divisas.
A media mañana del 11 de noviembre, se reportó una explosión mayor alrededor de las instalaciones de manejo de petróleo y de gas de Punta de Mata, en el oriente de Venezuela. Varios heridos fueron atendidos en clínicas cercanas y, aunque no está confirmado, hay varias personas desaparecidas.
El accidente forzó el cierre de varias instalaciones relacionadas, incluyendo la producción de gas y petróleo y equipos que procesan corrientes de hidrocarburos en la instalación afectada, llamada Muscar. El complejo Muscar, está ubicado al este y a once kilómetros de la población de Punta de Mata, entre los campos petroleros Musipán y Carito, en el Estado Monagas. Recibe y procesa gas natural procedente de los campos Carito y Pirital y parcialmente del Furrial.
La planta Muscar de PDVSA trata gas de producción que la empresa re-inyecta en sus campos petroleros, así como también envía gas a plantas procesadoras para el consumo doméstico. No está claro dónde y en qué consiste exactamente el daño, pero podría tener graves consecuencias que afecten la distribución de gas metano para el mercado doméstico, y la disponibilidad de propano y butano. También es posible que impacte la producción de crudo liviano, lo que a su vez podría afectar la mezcla de crudo Merey-16 y la disponibilidad de materia prima para la refinería de Puerto la Cruz.
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