Se le conoció el día del triunfo de Petro. Había dejado antes su trabajo de mensajería para acompañarla y ha estado allí, incluido el discurso del desahogo en Cali.
El 20 de julio, cuando el presidente Petro viajó solo, sin la vicepresidenta Francia Márquez, a Santa Marta para liderar allí el desfile militar del Día de la Independencia, Francia Márquez se vio forzada a presidir la celebración en Bogotá. A su lado estaba su compañero Yerney Pinilla Ocoró, quien se mantuvo junto a ella durante la instalación de las sesiones ordinarias del Congreso. El mismo que ha estado junto a ella desde el día de la posesión del 7 de agosto del 2022 en la tarima de la Plaza de Bolívar y antes ya había aparecido al lado de Francia Márquez el día del triunfo electoral en la celebración en el Movistar Arena. Entonces Colombia conoció a la pareja de quien sería la vicepresidenta de Colombia.
Para Yerney Pinilla, la celebración del triunfo de Gustavo Petro era el culmen de un camino que había recorrido junto a Francia Márquez desde cuando decidió lanzarse por firmas a la presidencia, cuando aún no había logrado que el aval del Polo Democrático que la habilitó para participar en la consulta interna del Pacto Histórico, superando a otros candidatos como Camilo Romero, quien quedó en tercer lugar. La acompañó también cuando Gustavo Petro pasó a segunda vuelta; en tarima, estuvo a su lado el 29 de mayo en el Salón Rojo en el Hotel Tequendama.
Yerney Pinilla dejó su vida en Cali y en 2021 se trasladó a Bogotá, y estuvo junto a ella en el difícil proceso de recolección de firmas, siendo una desconocida y con muy escasos recursos económicos.
Menor que ella, cuando se juntaron, Francia Márquez tenía a sus dos hijos, Carlos Adrián, estudiante de medicina en Cuba, y a Kevin, quien vive en Houston, Estados Unidos. Yerney Pinilla trabajaba como mensajero desde 2014 en la tradicional empresa de carnes frías Alimentos La Cali-Berna, fundada por Aurelio Gringberg ochenta años atrás.
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Yerney Pinilla asumió su rol de pareja de la vicepresidenta desde el primer día que Francia Márquez tomó posesión de la casa de la vicepresidencia, vecina de la Casa de Nariño. La acompañó en su primera gira al África, y siempre su discreta presencia, sin declaraciones ni entrevistas, es un ancla ejerciendo un cargo inédito en el país, similar al de Douglas Emhoff, el esposo de Kamala Harris, la vicepresidenta de Estados Unidos, quien se hacía llamar «Segundo caballero de la nación», un reconocido abogado que renunció a todo para acompañar a la vicepresidenta en el cargo y luego en la campaña por la Presidencia como candidata del Partido Demócrata, en la que fue derrotada por el Republicano Donald Trump.
El año pasado, Yerney Pinilla completó un curso exprés que dicta la Policía Nacional para funcionarios públicos, que compartió con un escogido grupo de 55 personas que después de ocho meses obtuvieron el título de Profesional Oficial de la Reserva de la Policía Nacional como Teniente. Fue compañera de curso la Superintendente de Industria y Comercio, Cielo Rusinque.
Sigue firme, como apoyo a Francia Márquez en todos los eventos públicos de alta exposición, como fue la manifestación en Cali de apoyo a la Reforma Laboral del 18 de marzo; su primera aparición después del tenso Consejo de ministros que condujo, además, a la pérdida de su rol de Ministra de la Igualdad. Repitió en la marcha masiva del 1 de mayo en favor de las reformas sociales.
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En la instalación del Congreso el pasado 20 de julio, Yerney Pinilla sobresalió por su formalidad con un elegante traje, opacando al de los propios senadores y representantes en una sesión desordenada y carente de protocolo. Tanto la vicepresidenta como su compañero mantuvieron su compostura frente a la lluvia de críticas y arengas contra el gobierno, así como el extenso discurso de dos horas y media del Presidente.
En el impactante discurso de Francia Márquez el pasado 25 de julio en Cali, Yerney Pinilla la apoyó desde el público. Presenció como ella se desfogaba con unas palabras firmes y duras de crítica al gobierno que ayudó a elegir, pero del cual ha sido excluida. La usaron para la foto, pero no para la toma de decisiones. Disentir no es traicionar, también dijo.
Los 785.215 votos que Francia Márquez consiguió en la Consulta Popular del Pacto Histórico en marzo de 2023 fueron su pasaporte para ser formula presidencial de Gustavo Petro, quien nunca estuvo convencido y buscó siempre una candidata que ampliara el espectro de la izquierda. Una de las promesas de campaña de Petro fue la creación del Ministerio de la Igualdad que lideraría su vicepresidenta, Francia Márquez, pero nunca, según ella, recibió el apoyo para cumplir con la misión hasta que el Presidente forzó su salida. La frustración frente al Gobierno del cambio es algo que la Vicepresidenta no disimula.
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