El pasado sábado, el portero del AC Milan, Mike Maignan, abandonó el campo de juego de Udine (Italia) en señal de protesta por los insultos racistas que resonaban en el recinto durante el partido de la Serie A italiana contra el Udinese.
Mike Maignan, objetivo de insultos racistas, hizo un gesto a su equipo para que detuviera el partido, lo que provocó una interrupción temporal.
Tras un gol acertado que ponía a su equipo con una ventaja de 1-0, Maignan, sin dudarlo, expuso sus preocupaciones al árbitro.
El jugador de 28 años habló sobre su angustiosa experiencia en Milan TV, destacando los reprobables ruidos de mono de los aficionados del Udinese. Familiarizado con tales sucesos, Maignan exigió que se tomaran medidas severas contra los culpables.
“Hay que imponer sanciones contundentes; la mera retórica ya no sirve. Es crucial condenar las fechorías”, subrayó Maignan.
Aunque reconoció que la mayoría de los aficionados estaban allí para apoyar a su equipo, lamentó la conducta racista de la minoría que mancilló el espíritu del juego.
Tras el incidente, se vio Maignan angustiado dirigirse hacia el túnel, a pesar de los esfuerzos de sus compañeros por consolarlo.
Previamente, el árbitro fue avisado de los cánticos racistas, lo que dio lugar a una petición pública para que cesaran tales comportamientos.
Tras una breve pausa, Maignan y su equipo regresaron al campo, logrando una victoria por 3-2.
Maignan confesó entonces su reticencia inicial a continuar el partido. “Me faltaban las ganas de jugar… pero como familia, decidimos unirnos”, reveló.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, prestó su apoyo a Maignan e hizo un llamamiento a la acción contra el racismo.
“El racismo y la discriminación no tienen cabida en el fútbol ni en la sociedad. Los jugadores afectados por los sucesos del sábado cuentan con todo mi apoyo”, declaró, abogando por sanciones más estrictas, incluida la pérdida automática para los equipos cuyos hinchas cometan actos racistas.
On behalf of FIFA, Gianni Infantino, FIFA President, has made the following statement:
“The events that took place in Udine and Sheffield on Saturday are totally abhorrent and completely unacceptable. There is no place for racism or any form of discrimination – both in football…
— FIFA Media (@fifamedia) January 21, 2024
Lamentablemente, este suceso no es único. Maignan fue objeto de cánticos comparables en un partido en Cagliari dos temporadas antes.
El fútbol italiano y europeo lleva años lidiando con el racismo, y jugadores como Kevin-Prince Boateng, Mario Balotelli y Romelu Lukaku también sufrieron insultos racistas.
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