08-01-2015 08:07:00 a.m. | Jesús Hurtado.- Pese a no haber sido convocados a la reunión sostenida este martes con miras a la reactivación del sector, los productores nacionales de partes para vehículos se aferran a los ofrecimientos hechos por el Ejecutivo Nacional a las ensambladoras respecto al rescate del sector, pero creen que sin una verdadera política de estímulo las promesas no llegarán a concretarse.
“El daño al sector ha sido grave y para revertir esta situación es necesario que el flujo de divisas sea constante”, señaló el propietario de una empresa del área que prefirió el anonimato, quien recordó que la baja disponibilidad de divisas ha sido uno de los mayores obstáculos que ha enfrentado el sector, pues la mayoría de la empresa depende de materia prima importada para sus procesos.
Recordó que los pocos recursos otorgados a determinadas empresas a través de subastas del Sicad I sirvieron para paliar la situación de fabricantes claves como productores de baterías, cauchos, filtros y aceites, pero la gran mayoría de los fabricantes quedó fuera de las subastas, por lo que tuvieron que recurrir al endeudamiento con sus proveedores o adquirir insumos con recursos propios a dólar libre, lo que, lógicamente, encareció de manera exponencial sus costos.
En cuanto a la materia prima nacional, la fuente recordó que la capacidad de la producción de las empresas públicas de Guayana fue otro duro golpe para los fabricantes, quienes no contaron con insumos en otros tiempos de fácil acceso.
En este mismo sentido, la fuente recordó que de acuerdo con informaciones filtradas tras la reunión sostenida este martes entre el ministro de Industrias José David Cabello, y representantes de las ensambladoras, no se trató el tema de la deuda que mantienen autopartistas y automotrices con sus acreedores, y que en conjunto sumaría más de 2.000 millones de dólares, según recientes cálculos.
Amanecerá y veremos
La recuperación de la industria es uno de los temas pendientes del gobierno, que desde el año pasado ha venido sosteniendo reuniones con representantes de las empresas y de los autopartistas que, no obstante, no lograron detener la caída de la industria.
De hecho, desde principios de año y hasta finales del tercer semestre se convocaron mesas de trabajo con miras a conocer y atender las necesidades del sector de autopartes y automotor en general, pese a lo cual la industria terminó el 2014 con uno de los peores resultados en 50 años.
En efecto, aunque la Cámara de Fabricantes Venezolanos de Productos Automotores (Favenpa) no ha dado a conocer los resultados correspondientes a 2014, ya desde mediados de año advirtió un retroceso cercano a 80%.
Este descenso es consecuencia de la caída en una proporción similar en el ensamblaje de autos, área de negocios hacia la cual se destina cerca de 70% de las partes y piezas que manufacturan los aproximadamente 100 agremiados a la cámara.
El restante 30% de la producción es destinada al mercado de reposición, segmento que se ha convertido en la tabla de salvación de muchas industrias.
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