La startup británica de inteligencia artificial, Builder.ai, se encuentra al borde de la bancarrota. Respaldada por gigantes como Microsoft Corp. y el Qatar Investment Authority, la empresa se ve obligada a dar este paso tras la incautación de la mayor parte de sus fondos, según el informe original. La complicada situación económica de Builder.ai nos ofrece un vistazo a los desafíos internos que pueden enfrentar las prometedoras startups de IA.
A pesar de haber recaudado una impresionante suma de $250 millones hace dos años, liderada por el Qatar Investment Authority, la empresa no ha logrado mantenerse su estabilidad financiera. Microsoft también realizó una inversión estratégica en Builder.ai en 2023, reafirmando su posición como un actor importante en el ámbito tecnológico. Sin embargo, no fue suficiente para contrarrestar los efectos negativos de decisiones pasadas y los retos económicos actuales, según el CEO Manpreet Ratia.
Builder.ai se ha visto forzada a reducir sus proyecciones de ventas menos de dos meses atrás, lo que marcó el comienzo de una serie de decisiones críticas. Entre ellas, la contratación de auditores independientes para revisar dos años de cuentas, buscando respuestas ante sospechas de cifras de ventas infladas. Este caos financiero ha llevado al fundador Sachin Dev Duggal a abandonar su puesto como CEO en febrero, siendo reemplazado por Manpreet Ratia, quien ahora enfrenta la tarea de navegar en estas turbulentas aguas financieras.
Las restricciones para mover los $5 millones restantes de su cuenta en India han complicado aún más la situación de Builder.ai, dejando a sus empleados sin salarios. Esta falta de liquidez es consecuencia de la acción de Viola Credit, que incautó $37 millones que había prestado el año anterior. La incapacidad para cumplir con las obligaciones ha acelerado el proceso de bancarrota en las cinco jurisdicciones donde opera, incluyendo Estados Unidos y el Reino Unido, destaca el informe.
Builder.ai se prepara para designar a un administrador que manejará sus asuntos durante este proceso de insolvencia. Aunque la empresa, establecida en 2016, había logrado atraer a importantes inversores como la International Finance Corp. del Grupo del Banco Mundial, WndrCo de Jeffrey Katzenberg y el incubador DeepCore del Grupo SoftBank, los errores estratégicos y la mala gestión financiera ha pasado factura. Así, esta crisis destaca los riesgos inherentes en el pujant pero volátil mundo de las startups de inteligencia artificial.
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