Esta fue la afirmación que le escuchamos decir a un alto funcionario de la Policía Nacional Boliviariana cuando acudió a un centro de votación de Caracas a ejercer su derecho al voto. Nosotros nos encontrábamos haciendo un pequeño recorrido por diferentes puntos de la ciudad para constatar cómo transcurría la jornada.
Cuando el funcionario llegó al recinto donde se encontraba la mesa de votación que le correspondía, la jefe encargada asombrada por su fuerte y corpulenta apariencia, vestido con uniforme impecable y nuevo y portando los accesorios que suelen llevar los policías en estas jornadas electorales, le pregunto: ¿ustedes están armados?, a lo que respondió sin titubear: “estamos armados de valor”. Todos quedamos atónitos y esperanzados, quizás por el confiable y favorable ambiente electoral que nos rodea.
Aunque podemos entender la frase de varios modos y admitir distintas interpretaciones, preferimos tomar el camino de ver el vaso medio lleno. El funcionario se encontraba acompañado con dos jóvenes, muy jóvenes y flacos, que portaban uniforme de la Guardia Nacional Bolivariana, ellos también sufragaron, aunque su apariencia lucía muy distante del líder de la manada.
También durante nuestro recorrido pasamos por la emblemática Unidad Educativa Gustavo Herrera ubicada en la Avenida Libertador de Caracas. Allí estaban bajo el sol y junto al pueblo mismo, haciendo su cola, un gran número de soldados rasos que nos dijeron que estaban destacados en la base aérea de La Carlota. Suponemos entonces que no habían sido integrados a la Operación República, ya que les tocó igual que a cualquier ciudadano común, hacer su fila. Llamó la atención su amabilidad y hasta sus sonrisas.
Continuando con el relato de nuestro recorrido, tanto en el este como en oeste pudimos ver en algunas zonas populares que no había tanta participación ni colas, al menos al cierre de esta nota. En el Paraíso y Vista alegre si había votantes en colas, así como en las zonas de Altamira y Chacao donde se desbordó el pueblo.
Hay que recordar que el proceso es rápido, sencillo y solo dura pocos minutos, esas son las bondades del sistema electoral. Se reportaron algunas incidencias de retrasos, negativas de acreditación de testigos en las mesas, pero esto se fue corrigiendo con el paso del tiempo, se pudo ver a la gente apostada en los centros de votación defendiendo sus derechos a toda costa. La gente sació su hambre de votar de expresar su voluntad, Incluso desde la noche de este sábado se pudieron ver vigilias en varios Estados.
Un lamentable incidente en Maturín, con unos disparos que hubo en un centro de votación y dejaron herida a una mujer, es una novedad aislada pero lamentable reportada hasta esta hora durante la jornada. Esperemos que civismo y la paz imperen hasta el final
La opinión emitida en este espacio refleja únicamente la de su autor y no compromete la línea editorial de La Gran Aldea.
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